Escrito por: Dr. Renato Jiménez Calabresse Reumatólogo en Viña del Mar
El tratamiento consiste en modular el sistema de la defensa. Un paciente que empieza con dolor en sus manos por artritis reumatoide no tiene por qué llegar a la deformidad.
La Artritis o Artritis Reumatoide es una Enfermedad Autoinmune. Cuando este padecimiento se manifiesta, se debe acudir a un Reumatólogo. Una enfermedad autoinmune es cuando el sistema inmune del cuerpo o de las defensas empieza a atacar el cuerpo que lo contiene. En específico, la Artritis Reumatoide suele presentarse en mujeres, entre los 30 a 50 años de edad.
La Artritis Reumatoide afecta, principalmente, las articulaciones de manos y muñecas, presentándose mucha rigidez en las mañanas, es decir, los pacientes no pueden mover sus manos o le es imposible hacer sus actividades normales. Además, hay dolor e inflamación.
Aunque el origen es autoinmune, los factores genéticos pueden ser un determinante para su aparición.
Tratamiento a largo plazo para evitar la deformidad
El tratamiento actual para la Artritis Reumatoide consiste en modular el sistema de la defensa para que no ataque al paciente y dañe sus articulaciones. El mejor tratamiento está enfocado a prevenir la deformidad. Un paciente que empieza con dolor en sus manos por artritis reumatoide no tiene por qué llegar a la deformidad, la idea es mejorar la calidad de vida, prevenir las malformaciones y el dolor a largo plazo.
Desafortunadamente, la Artritis Reumatoide no se puede prevenir. Hasta ahora no existe algo específico en cuestiones de dieta o ejercicio. Se dice que tronarse los dedos puede ocasionar la Artritis Reumatoide, pero eso es un mito. Las únicas cosas que sí están relacionadas directamente es el tabaquismo, por lo que dejar de fumar sí la previene. Se recomienda hacer ejercicio.
Es fundamental destacar que la prevención de las deformaciones —y, por ende, de la invalidez— sólo puede lograrse a través de un diagnóstico y tratamiento precoz realizado por un especialista. El Reumatólogo es quien maneja las terapias verdaderamente preventivas del daño articular, como los DMARDs (agentes modificadores de la enfermedad) y las Terapias Biológicas, entre otras. Además, es el encargado de coordinar un enfoque multidisciplinario que favorezca la rehabilitación y la reincorporación laboral en los casos más avanzados