Escrito por: Dr. Agustín Álvarez Plaza Cirujano General en Providencia
Las Hernias Ventrales, también conocidas como Hernias de la Línea Media o Hernias del Aparato Abdominal Anterior, están en estrecha relación con la línea media de nuestro cuerpo, también conocida como línea alba.
El aparato abdominal se compone de músculos anteriores y laterales, y está cubierto por una capa de tejido conectivo llamada fascia, que otorga firmeza a nuestra pared abdominal.
Entendiendo las Hernias Ventrales
Las Hernias Ventrales se caracterizan por la presencia de un "hoyo" en la pared abdominal a lo largo de la línea media. En este punto de debilidad, la presión interna del abdomen puede causar que tejido, grasa e incluso órganos se abulten a través del defecto en la fascia. A medida que las Hernias crecen en tamaño, pueden incluso alojar órganos como intestinos y estómago, lo que puede resultar en molestias significativas.
Causas y factores de riesgo
La aparición de Hernias Ventrales está relacionada con diversos factores. Por ejemplo, las incisiones quirúrgicas previas debilitan la fascia y generan una predisposición a la formación de Hernias. Algunas condiciones que son factores de riesgo, son:
- Tabaquismo
- Aumento de Peso u Obesidad
- Problemas Urológicos
Abordaje quirúrgico y calidad de vida
La cirugía se convierte en una herramienta esencial para tratar las Hernias Ventrales, especialmente cuando los defectos en la pared abdominal superan cierto tamaño. El objetivo principal de la cirugía es reparar el defecto y prevenir la recurrencia. En este sentido, se han desarrollado técnicas modernas que permiten el refuerzo con mallas en diferentes espacios abdominales, mejorando los resultados a largo plazo.
Prevención y cuidados
La prevención de las Hernias Ventrales se enfoca en el control de factores de riesgo, como el peso y la presión abdominal. Mantener un peso adecuado y saludable puede reducir significativamente la probabilidad de desarrollar una Hernia. Además, el abandono del tabaco y el manejo de condiciones médicas como el estreñimiento o problemas prostáticos también juegan un papel fundamental en la prevención.