
Hipertensión Arterial: controla tu presión, salva tu vida
La Hipertensión Arterial es una de las Enfermedades Crónicas más prevalentes en Chile, afectando a una gran parte de la población adulta.
Según el Ministerio de Salud, alrededor del 27% de los chilenos mayores de 15 años padece Hipertensión, una condición que, si no se controla adecuadamente, puede derivar en graves complicaciones cardiovasculares, renales y cerebrales. En este artículo, explicaremos en detalle qué es la Hipertensión Arterial, cuáles son sus causas, síntomas, factores de riesgo y los tratamientos más efectivos para su control.
¿Qué es la Hipertensión Arterial?
La Hipertensión Arterial es una enfermedad en la que la presión de la sangre en las arterias es constantemente elevada. Se considera Hipertensión cuando la presión sistólica (máxima) es igual o superior a 140 mmHg y/o la presión diastólica (mínima) es igual o superior a 90 mmHg en mediciones repetidas.
El aumento de la Presión Arterial obliga al corazón a trabajar más intensamente para bombear sangre, lo que puede ocasionar daño progresivo en órganos vitales como el corazón, los riñones y el cerebro.
Causas y factores de riesgo
La hipertensión puede desarrollarse debido a múltiples factores, entre ellos:
- Factores genéticos: tener antecedentes familiares de Hipertensión aumenta el riesgo
- Edad: a medida que envejecemos, los vasos sanguíneos pierden elasticidad, favoreciendo el aumento de la presión arterial
- Sedentarismo: la falta de ejercicio contribuye a la Obesidad y al desarrollo de Enfermedades Cardiovasculares
- Dieta poco saludable: un alto consumo de sal, grasas saturadas y alimentos ultraprocesados incrementa el riesgo de Hipertensión
- Obesidad: el exceso de peso obliga al corazón a trabajar más, aumentando la Presión Arterial
- Estrés: el Estrés Crónico puede provocar aumentos temporales y sostenidos de la Presión Arterial
- Consumo de alcohol y tabaco: ambos factores afectan la salud cardiovascular y pueden elevar la Presión Arterial
Síntomas de la Hipertensión
En la mayoría de los casos, la hipertensión es una "enfermedad silenciosa", es decir, no presenta síntomas evidentes hasta que provoca complicaciones graves. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar:
- Dolor de Cabeza intenso
- Mareos o Vértigo
- Visión borrosa
- Palpitaciones
- Sangrado nasal (en casos graves)
Dado que la Hipertensión puede pasar desapercibida por años, se recomienda realizar chequeos médicos periódicos para su detección temprana.
Diagnóstico y tratamiento para la Hipertensión Arterial
Diagnóstico
El diagnóstico de Hipertensión se realiza mediante la medición repetida de la Presión Arterial en diferentes momentos del día. En algunos casos, los médicos pueden recomendar una Monitorización Ambulatoria de la Presión Arterial (MAPA) para obtener registros precisos durante 24 horas.
Además, pueden solicitarse exámenes complementarios como:
- Electrocardiograma (ECG): para evaluar la actividad eléctrica del corazón
- Exámenes de sangre: para medir Colesterol, glucosa y función renal
- Ecocardiografía: para analizar el estado del corazón y las arterias
Tratamiento
El tratamiento de la Hipertensión varía según la gravedad de la enfermedad y la presencia de otras condiciones médicas. Las opciones incluyen:
Cambios en el estilo de vida
- Dieta equilibrada: reducir el consumo de sal (menos de 5 gramos al día según la OMS), grasas saturadas y azúcares
- Ejercicio físico regular: al menos 150 minutos de actividad moderada a la semana (como caminar, nadar o andar en bicicleta)
- Reducción del Estrés: practicar técnicas de relajación como yoga o meditación
- Abandono del tabaco y reducción del alcohol: mejora la función cardiovascular y ayuda a controlar la Presión Arterial
Medicamentos antihipertensivos
En algunos casos, los médicos prescriben medicamentos para controlar la Presión Arterial, tales como:
- Diuréticos: ayudan a eliminar el exceso de líquidos y sodio del cuerpo
- Betabloqueadores: disminuyen la frecuencia cardíaca y reducen la presión arterial
- Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA): relajan los vasos sanguíneos
- Bloqueadores de los canales de calcio: ayudan a reducir la presión arterial al relajar las arterias
El tratamiento farmacológico debe ser estrictamente supervisado por un médico, ya que su efectividad depende del seguimiento adecuado y la adherencia del paciente.
Complicaciones de la Hipertensión no controlada
Si la Presión Arterial no se mantiene dentro de los niveles adecuados, pueden aparecer complicaciones graves, como:
- Infarto de Miocardio
- Accidente Cerebrovascular (ACV)
- Insuficiencia Renal
- Aneurismas
- Pérdida de visión (Retinopatía Hipertensiva)
Por ello, el diagnóstico temprano y el control riguroso son esenciales para prevenir estos riesgos.
Situación de la Hipertensión en Chile
En Chile, la Hipertensión Arterial representa un importante problema de salud pública. Según la Encuesta Nacional de Salud, más del 70% de los adultos hipertensos no logran controlar su Presión Arterial, lo que aumenta el riesgo de Enfermedades Cardiovasculares.
El Programa de Salud Cardiovascular (PSCV) del Ministerio de Salud de Chile busca mejorar la detección, tratamiento y seguimiento de pacientes con Hipertensión a través de los centros de salud primaria.
¿A qué especialista acudir?
La Hipertensión Arterial es una Enfermedad Crónica que requiere un enfoque integral para su prevención y tratamiento. Mantener un estilo de vida saludable, realizar controles médicos periódicos y seguir el tratamiento prescrito por un especialista son claves para evitar complicaciones graves.
Si sospechas que podrías tener presión arterial alta, consulta con un especialista en Medicina Interna para recibir el diagnóstico adecuado y comenzar un tratamiento oportuno.