A lo largo de la historia, el deseo de mantener la juventud y combatir el envejecimiento ha llevado a la Medicina a buscar constantemente formas de prevenir y corregir los signos de envejecimiento.
La Medicina Anti-envejecimiento se fundamenta en el estudio del envejecimiento natural para prevenir factores perjudiciales, promover la salud y corregir los efectos del envejecimiento.
Definición y síntomas del Envejecimiento
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el envejecimiento como un proceso fisiológico que comienza en la concepción y causa cambios en las características de las especies a lo largo de la vida. Es un enfoque que busca retrasar y/o minimizar los efectos del envejecimiento, promoviendo la longevidad y mejorando la calidad de vida.
Los síntomas y signos del envejecimiento son variados e incluyen:
- Andropausia en hombres y Menopausia en mujeres
- Pérdida de funciones vitales
- Disminución de la función renal
- Deterioro de la memoria
- Pérdida de coordinación motora
- Atrofia o degeneración de órganos y tejidos: Atrofia en las neuronas de las células del corazón, riñones, disminución de colágeno
- Presencia de Cánceres
Estos síntomas aumentan la realidad de muerte.
Tratamientos personalizados en Medicina Anti-Envejecimiento
El tratamiento en Medicina Anti-Envejecimiento se personaliza considerando la edad, género, genética, estado de salud actual y objetivos individuales del paciente. Se inicia con una evaluación integral del paciente para asegurar su estabilidad metabólica.
Los enfoques terapéuticos abarcan desde la Hormonoterapia hasta la actividad física y la Nutrición, combinando tratamientos médicos y estéticos. La Nutrición y el ejercicio son fundamentales en esta rama porque ayudan a mantener un peso saludable, lo que se traduce en mejorar la función cardiovascular, fortalecer los músculos, mantener la cantidad ósea y promover la salud en general.
Otra de sus funciones es reducir el riesgo sufrir Enfermedades Crónicas, como Diabetes, Hipertensión o Colesterol.
La evaluación médica exhaustiva es esencial para determinar las necesidades específicas de cada paciente en Medicina Anti-envejecimiento. Se evalúa mediante pruebas de laboratorio, evaluaciones médicas y mejoras en la calidad de vida, incluyendo mayor energía, mejor función cognitiva y una apariencia más saludable. Los tratamientos exitosos se basan en la prevención o retraso de enfermedades relacionadas con la edad.
Obstáculos y avances en la Medicina Anti-Envejecimiento
A pesar del rápido avance, la Medicina Anti-envejecimiento enfrenta obstáculos como el escepticismo, la falta de aceptación y la clasificación oficial del envejecimiento como enfermedad. Sin embargo, recientes avances incluyen la introducción de un código de extensión en las enfermedades relacionadas con la edad en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), allanando el camino para futuras terapias preventivas.
Aunque el envejecimiento no es considerado, oficialmente, una enfermedad, esta categoría allana el camino para una posible futura clasificación para reducir los obstáculos regulatorios que obstaculizan el desarrollo de terapias estratégicas preventivas relacionadas al envejecimiento.
La nación mundial estima que para el 2050 el 2% de la población tendrá más de 60 años, por eso, el envejecimiento debe ser tratado y prevenido antes de que aparezca, con la finalidad de que la gente no llegue a hospitales o sufrir de Enfermedades Crónicas y/o Amputaciones.
Lamentablemente, la Medicina Actual está atrasada con esta idea. Pero la Medicina Anti-Envejecimiento ha tenido éxito, teniendo medidas objetivas.