Síndrome del Túnel Carpiano: un enfoque integral para aliviar tu dolor
El Síndrome del Túnel Carpiano es una afección que ocurre cuando existe una presión excesiva en el nervio mediano a nivel de la muñeca.
¿Cómo se define el Síndrome del Túnel Carpiano?
La definición del Túnel Carpiano corresponde al atrapamiento del nervio mediano en el canal del carpo, que está ubicado en la muñeca. El canal del carpo está conformado por algunos huesos del carpo y por el ligamento transverso de la muñeca. En este lugar puede existir un atrapamiento de este nervio, el cual transcurre junto con los tendones flexores dentro del canal carpiano.
Al aumentar la presión dentro del canal carpiano, el paciente siente algunas molestias que son características. Esa es, más o menos, la definición del atrapamiento del túnel carpiano en el canal del carpo.
¿Qué tan común es esta condición y quiénes tienen mayor riesgo de desarrollarla?
Es una condición bastante común. De hecho, corresponde a una de las principales patologías que atendemos en cirugía de mano y muñeca. Probablemente es la patología que con mayor frecuencia intervenimos u operamos; es bastante frecuente.
Es más frecuente en las mujeres de edad adulta, mayores de 50 años. También es más frecuente en mujeres que en varones, y es común en pacientes que tienen algunas condiciones de riesgo, como trabajo forzado, maniobras repetitivas o sobrecarga en la muñeca. Este es el principal grupo de riesgo.
También existen otros tipos de pacientes con condiciones o patologías asociadas, o que han sufrido traumatismos que pueden ocasionar, en forma aguda, un Túnel Carpiano.
¿Cuáles son sus principales causas?
La principal causa está definida como una causa idiopática, en donde existe un engrosamiento del retináculo flexor que produce un aumento de la presión dentro del canal carpiano. No se sabe bien la causa. Está asociado a algunos factores de riesgo, pero su origen específico se desconoce.
Existen otras patologías que también tienen mayor riesgo de desarrollar el Túnel Carpiano, como pacientes diabéticos, con Hipotiroidismo o con Artritis Reumatoide, quienes también tienen mayor riesgo de desarrollar un Túnel del Carpo.
¿Qué pruebas son necesarias para confirmar el diagnóstico?
Cuando los pacientes manifiestan síntomas en relación al Túnel Carpiano, en la primera valoración se realiza un examen físico que tiene una alta sensibilidad diagnóstica. Con este examen físico se puede, con una alta certeza, diagnosticar un Síndrome del Túnel Carpiano.
Existen algunas pruebas o maniobras clínicas que se utilizan, entre ellas, algunos test específicos como el Test de Durkan, que consiste en la compresión en la zona del canal carpiano durante un tiempo específico, evaluando si el paciente presenta molestias típicas. También está el Test de Phalen, que consiste en pedir al paciente que flexione la muñeca y evaluar si aparecen síntomas.
Además, se solicita casi siempre algún examen complementario, que puede incluir el estudio de imágenes como la Ecografía, donde se observa un atrapamiento o engrosamiento del nervio mediano a la entrada del canal carpiano. A veces también se solicita un estudio de Electrofisiología, que permite medir la patología y su gravedad.
Habitualmente se combinan tres elementos diagnósticos:
- Anamnesis
- Examen físico
- Confirmación mediante Ecografía o Electromiografía
¿Cuáles son los tratamientos iniciales para aliviar los síntomas?
En casos de Túnel Carpiano leve o moderado y con poco tiempo de evolución, se puede indicar el uso de una órtesis nocturna. Se le pide al paciente que utilice una muñequera con soporte palmar, con el objetivo de evitar la flexión de la muñeca durante la noche y, por ende, el aumento de presión en el túnel carpiano, lo que alivia las molestias.
A esto se asocia habitualmente algún tratamiento farmacológico para el dolor o para desinflamar el túnel del carpo, además de ejercicios de Kinesiología o rehabilitación.
Infiltración y cirugía
Si con este tratamiento inicial no ceden los síntomas, el paciente puede pasar a una segunda opción terapéutica: la utilización de un medicamento (un corticoide) que se administra por vía ecográfica o palpatoria. Es más seguro hacerlo por vía Ecográfica. El medicamento se inyecta directamente en el canal carpiano. Si el paciente persiste con las molestias, se puede considerar una cirugía.
¿Cuándo es necesario recurrir a una cirugía para tratar el Túnel Carpiano?
En general, los pacientes con síntomas persistentes, que ya han realizado tratamiento conservador, Kinesioterapia y han usado férula, pero aún presentan molestias nocturnas importantes o síntomas diarios, deben acudir a control para evaluar la opción de un tratamiento quirúrgico.
Indicaciones quirúrgicas
También deben ser evaluados para cirugía aquellos pacientes que se encuentran en etapas tardías, cuando el túnel está más avanzado y hay pérdida de fuerza para tomar objetos. Los pacientes lo manifiestan como caída de objetos, caída de la loza o incapacidad para realizar maniobras habituales en la vida diaria.
En esos casos, se debe intentar una solución definitiva, que es la cirugía. Finalmente, también se indica cirugía en pacientes que, a pesar del tratamiento, continúan con molestias y cuya electromiografía indica un Túnel Carpiano Severo.