Cerca del 50% de estos Tumores son silentes, es decir, no producen síntomas evidentes. Si presenta una Disminución de Visión debe acudir a una intervención quirúrgica urgentemente.
El Tumor De Hipófisis es una patología benigna con una presentación heterogénea que afecta aproximadamente al 15% de los Tumores Cerebrales. Su manifestación de acuerdo al tipo.
Problemas hormonales
Cuando los Tumores son endocrinológicamente sintomáticos, a menudo requieren intervención quirúrgica. Algunas hormonas en exceso son las que ocasionan riesgos serios para la salud del paciente como:
- Exceso de corticoides
- Aumento de Hormona de Crecimiento
- Hiperproducción de prolactina, ya que tienen una respuesta favorable al tratamiento médico
La manifestación de la enfermedad es variable por la complejidad de los síntomas, van desde aspectos visuales o endocrinos significativos. La Pérdida Visual progresiva, especialmente el Síndrome Plasmático, es un signo distintivo que alerta para una intervención quirúrgica de inmediato.
Revisión constante
El diagnóstico de esta enfermedad es diverso y puede ocurrir colateralmente durante exámenes por otros motivos, como Traumatismos. El estudio abarca una evaluación endocrinológica completa, imágenes detalladas del cerebro y un análisis de la función visual.
Opciones de tratamiento
El tratamiento del Tumor de Hipófisis se basa en tres pilares:
- La observación: esto implica cualquier sospecha
- Seguimiento periódico: es una opción para tumores que no presentan síntomas evidentes
- Cirugía: es un pilar esencial para aquellos endocrinológicamente sintomáticos o con compromiso visual. La Radioterapia es considerada en situaciones específicas
Como con cualquier procedimiento quirúrgico, existen riesgos, que implica sangrado, infección y complicaciones anestésicas. La explicación detallada de estos riesgos se debe dar en consulta, para que el paciente tome decisiones informadas.
En última instancia, el manejo del Tumor de Hipófisis es multidisciplinario e implica la colaboración entre Neurocirujanos, Endocrinólogos y Otorrinolaringólogos. Cada paciente es único y requiere un enfoque personalizado para asegurar el mejor resultado posible en su tratamiento.