
Evita Amputaciones: estrategias de prevención para pacientes diabéticos
La Diabetes puede tener un impacto significativo en el sistema musculoesquelético, dando lugar a una variedad de problemas que pueden limitar la movilidad y la calidad de vida.
¿Cómo afecta la Diabetes al sistema musculoesquelético?
La Diabetes es una enfermedad multisistémica que afecta prácticamente a todo el cuerpo. En este sentido, el sistema musculoesquelético no es la excepción, viéndose afectada la flexibilidad de las articulaciones y los tendones debido a periodos prolongados de Hiperglicemia.
Además, estos mismos periodos largos de hiperglicemia impactan los nervios y las raíces nerviosas que van a las extremidades, lo que produce en los pacientes pérdida de sensibilidad, dolor y disminución de la fuerza muscular, especialmente en las extremidades inferiores.
¿Qué es el Pie Diabético? ¿A qué se expone el paciente si no es tratado?
Las complicaciones mencionadas anteriormente, como la rigidez, la pérdida de flexibilidad y la polineuropatía, predisponen al desarrollo de un síndrome complejo: el Pie Diabético. Este síndrome, si no se cuida y no se previene, puede ser el precursor de las úlceras en los pies y, en el peor de los casos, de las amputaciones. Es importante señalar que, en Chile, el 70% de las Amputaciones tienen como causa principal la Diabetes.
¿Cuáles son los primeros síntomas del Pie Diabético?
Las primeras complicaciones relacionadas con el Pie Diabético suelen ser de tipo postural. Por ejemplo, pueden aparecer deformidades como los dedos en garra o el pie plano anterior. Estas alteraciones afectan la forma de pisar y caminar. Si no se tratan adecuadamente, estas complicaciones pueden llevar a problemas más graves como los mencionados anteriormente, afectando de manera significativa la calidad de vida del paciente.
¿Cómo se pueden evitar las complicaciones más graves del Pie Diabético?
Lo más básico e importante para prevenir estas complicaciones es que el paciente mantenga un buen control metabólico a lo largo del tiempo, siguiendo siempre las indicaciones de su Médico Diabetólogo y de la Nutricionista.
Además, es fundamental la intervención temprana, que incluye:
- Uso de plantillas y zapatos adecuados: diseñados específicamente para minimizar las consecuencias que la diabetes produce en el cuerpo.
- Programa de ejercicios: enfocado en mejorar la fuerza muscular general, especialmente en las extremidades inferiores, y en aumentar la flexibilidad de los tobillos y los pies
- Educación del paciente: durante las sesiones se hace énfasis en prácticas cotidianas que ayuden a prevenir complicaciones mayores, como evitar caminar descalzo, consultar con frecuencia al Podólogo y revisar y cuidar la piel de los pies
Estas medidas contribuirán significativamente a evitar complicaciones graves y a mantener una mejor calidad de vida en los pacientes diabéticos.