Vitiligo: qué es y cómo atenderlo (P2)
En niños o en zonas muy delicadas del cuerpo, se deben usar cremas de bajas potencias.
Dr. Jorge Ocampo Candiani
El tratamiento para el vitiligo, sabiendo que es una enfermedad multifactorial, varía dependiendo del tipo de vitiligo. Otros factores que el dermatólogo considera es la edad de los pacientes y la extensión de la despigmentación sobre la piel.
Por lo general, el tratamiento está basado en cremas con cortisona y, dependiendo de la localización y edad del paciente, será la potencia de la crema a usar.
Otros de los tratamientos son los inmunomoduladores tópicos, con los cuales se han visto excelentes resultados. Una técnica ideal es la luz ultravioleta, de la cual existen dos tipos: la A y B. La que se ha visto mejor respuesta o con menores efectos colaterales es la luz ultravioleta B de banda angosta, misma que se puede usar si es un vitíligo muy extenso. Ésta se irradia al paciente 2 o 3 veces a la semana y se incrementan las potencias. También se ha llegado a usar la luz ultravioleta A con respuestas bastantes efectivas.
Otra herramienta es la fototerapia focalizada, en la que, a través de una fibra de láser, se disparan a las manchas específicas.
Cómo tener una mejor calidad de vida
El vitiligo es una enfermedad crónica y no se puede hablar de una cura total, pero sí es posible tener casos donde es posible lograr una repigmentación del 40-60%. Las áreas que mejor repigmentan generalmente son la cara y el tronco. Las zonas más difíciles son las manos y los pies, pero esas zonas, como no están tan expuestas, muchas veces es posible cubrirlos con algún tipo de maquillaje o correctores que hacen que se oculte totalmente la mancha. Los pacientes que alcanzan una mayor repigmentación en general son aquellos que acuden a sus citas con regularidad y siguen al pie de la letra el tratamiento, además del acompañamiento de tratamientos psicológicos o psiquiátricos, cuando su dermatólogo lo juzgue necesario.