Recomendaciones para Control de Esfínteres y Enuresis: parte II

Artículo escrito por Dr. Enrique Vicentini Castillo.

Entrenamiento de un hábito regular para defecar y/u orinar en el hogar

Aquí nos centraremos en el Control de Esfínter Vesical Diurno (para orinar), que es el primero que se logra. El control anal tiene algunas diferencias, y por lo general, se adquiere más tarde. Aunque algunos dejan pañales de día y noche al mismo tiempo, es común que el control nocturno se logre mucho más tarde, habiendo niños que a los 7 años aún usan pañal de noche.

Es bueno pensar el proceso de Control de Esfínter un trabajo en el cual padres y niños tienen distintas tareas:

-         Es tarea de los padres: crear el ambiente de contención y apoyo necesario para este aprendizaje. Esto implica: reconocer las señales de que su hijo está listo para iniciar el proceso, recordar siempre que él es quien controla su cuerpo, dejar que él decida si usa el baño o los pañales, enseñarle palabras para nombrar adecuadamente las partes del cuerpo y los procesos de evacuación, ofrecer implementos que le ayuden a usar el baño (pelela o bacinica, pisito, silla especial, etc.), enfrentar los accidentes sin enojarse, sin burlas ni palabras desagradables, y evitar castigos, pero dar muchas felicitaciones respecto al control

-         Es responsabilidad del niño: decidir si usa el baño o un pañal, reconocer sus señales corporales cuando necesite ir al baño y usarlo a su propio ritmo

Lo más importante es enfrentar el proceso de manera relajada y positiva, sin poner muchas expectativas ni presiones (ni en el niño y ni en uno mismo), pero con la confianza de que es una destreza que en algún momento se adquirirá.

La primavera y el verano son épocas propicias para iniciar enseñarles a ir al baño, ya que los pequeños andan con menos ropa y ésta se seca más rápido. No es necesario que estén todo el día sin pañal, situación que puede aumentar el estrés en los niños y padres, sino que puede realizarse de modo progresivo, y al comienzo, en las horas del día con más temperatura y de preferencia después del almuerzo, comenzando por un rato: ½ a 1 hora, y en la medida que vaya aumentando la confianza, sobre todo, del niño.

Señales que indican que el infante está en el proceso de Control de Esfínter

-         Manifiesta incomodidad con el pañal mojado

-         Pide que le cambien el pañal sucio

-         Pasa al menos dos horas con el pañal seco

-         Tiene lenguaje para comunicar la necesidad de orinar

-         Tiene las habilidades motoras para bajarse pantalones y sentarse en la bacinica o pelela

Recomendaciones generales para que apliquen lo que sea pertinente a la situación concreta del niño

-         Se recomienda tener una rutina del horario para sentarse en el WC, lo más pareja posible y que no intervenga con salidas u otras actividades. Lo ideal es que sea 30 minutos después de una comida

-         La persona que lo cuida debe ser un modelo, es decir, realizar la acción de hacer del baño para que el pequeño la imite

-         Si orina o defeca corresponde felicitarlo de modo afectuoso, pero sin ansiedad, por el contrario, si no se logra que orine o defeque y se quiere levantar, se debe terminar el momento de entrenamiento, arreglarle la ropa y sin comentarios, ni reprimendas, dejarlo que realice lo que estaba planificado para después. Haga lo que haga hay que darle una valoración positiva, reconocer sus logros cuando corresponda, nunca castigar ni ridiculizar

Evitando posibles problemas

Vale la pena no olvidar que, en términos de desarrollo psicológico, los niños de 2 años están en la etapa de controlar su mundo. Usan su crecimiento y su desarrollo físico, cognitivo y sus habilidades verbales para ejercer poder sobre ellos mismos y sobre el mundo que los rodea y esto es parte de su desarrollo normal y positivo.

Entre los 2 y 5 años, aproximadamente, se define esta etapa del desarrollo como edad de la oposición. Este deseo natural y saludable de controlarlo todo puede conducir a conflictos y luchas de poder, ya que el niño se da cuenta de que una manera de sentirse en control es negándose a hacer algo que sus padres quieren que haga.

Si usted empieza a ver signos de conflicto en el proceso, es mejor quitar la presión, dejar el tema por un tiempo, hasta que el niño muestre signos de que está listo y nuevamente manifieste interés por tomar parte en el proceso. No hay nada de malo en decir “pensé que estabas listo para dejar los pañales, pero parece que me equivoqué. Lo vamos a dejar para más adelante, cuando de verdad quieras y estés listo para hacerlo”.

También vale la pena saber que hay algunas situaciones que pueden interferir en el proceso del control de esfínter y que es importante tener en cuenta. Por ejemplo, cuando están en situaciones de grandes cambios, ejemplo: el actual período de Pandemia por SARS-CoV-2 u otros cambios como empezar a ir al jardín infantil, cambio de cuna a cama, la llegada de un bebé a la familia o alguna crisis familiar como enfermedades graves, separación o muerte.

Es importante recordar que los niños con necesidades especiales: Trastornos del Desarrollo del Lenguaje, Déficit Atencional, Espectro Autista o alguna discapacidad visual, auditiva o motriz, pueden demorar más tiempo en adquirir el control de esfínter y necesitan mucha ayuda y apoyo de sus padres y educadores, y en algunos casos elementos especiales. Si como padres sienten que necesitan orientación en estos casos, pidan ayuda a los profesionales.