TDAH: Diferencias características de la infancia y vida adulta

TDAH: Diferencias características de la infancia y vida adulta

Editado por: Miguel Angel Ortega Tapia el 17/04/2024

La Neurodivergencia es un concepto que contempla la diversidad en el funcionamiento cerebral y el comportamiento de las personas.


Las condiciones más comunes son la Dislexia, Dispraxia, Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Autismo o Síndrome de Tourette. El concepto de Neurodivergencia se utiliza para describir a personas con habilidades y formas de pensar que no se ajustan a lo considerado común o estándar.


TDAH


El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una anomalía del neurodesarrollo que comienza en la infancia y cuya principal causa es genética. El TDAH comprende una combinación de problemas como dificultad para controlar la atención o conductas impulsivas.


Las características principales de este trastorno son:


  • Motivación basada en interés: Hay una atención inconsistente que sólo se activa en circunstancias específicas
  • Arousal: Dificultad para iniciar tareas o una resistencia similar a lo que se conoce como procrastinación
  • Dispersión: Existe una mayor distracción ante cualquier estímulo irrelevante
  • Multifoco: Capacidad que tienen las personas para atender más de un estímulo a la vez
  • Hiperfoco: Lapsos de profunda concentración y de conexión con la actividad que realizan
  • Hipersensibilidad emocional: Las personas con TDAH experimentan un sentimiento interno de inquietud o Hiperactividad mental, además de presentar pensamientos y emociones con mayor intensidad que la persona promedio
  • Frustración: El TDAH se manifiesta con un bajo umbral de irritabilidad y aburrimiento
  • Rechazo interpersonal: Tienen una intensa vulnerabilidad de la percepción de ser rechazadas, juzgadas u objetos de burla


Anteriormente se consideraba un trastorno propio de la infancia, sin embargo, actualmente se considera que en la adultez se manifiesta con distintas características.


Diferencias del TDAH en infancias y vida adulta


A pesar de que los síntomas suelen ser bastantes similares en infancias y personas adultas, existen características específicas debido a la edad. Por ejemplo, mientras que los niños y niñas tienen dificultar para permanecer en quietud, las personas en edad adulta presentan un pensamiento subjetivo de inquietud aún cuando están en un solo lugar.


Otro aspecto importante es que, las personas adultas, presentan una disminución de la Hiperquinesia (aumento excesivo de movimientos sin una finalidad). Además, las dificultades para concentrarse se trasladan a actividades propias de la vida adulta como el trabajo, estudio o la interacción interpersonal.


Algunos de los síntomas que son coincidentes en ambas etapas tienen que ver con la dificultad de prestar atención, la mala organización y la dificultad para concluir con las tareas o actividades que han empezado.


Finalmente, en la edad adulta se agregan problemas en:


  • Planeación y organización
  • Manejo de la frustración y contención de explosiones emocionales
  • Establecer prioridades u orden de importancia de tareas
  • Manejo de los cambios de humor
  • Manejo de la Ansiedad


Repercusiones en las diferentes etapas de la vida


El TDAH afecta de forma distinta la vida cotidiana de las personas según las actividades que desempeñen y que son específicas con la edad. Mientras una persona pre-escolar tiene únicamente problemas de comportamiento, las infancias en edad escolar presentan problemas de interacción social o académicos.


En el caso de la población adolescente se le suman problemas de Autoestima y existe una mayor predisposición a desarrollar conductas de riesgo como el Tabaquismo o las Autolesiones. Finalmente, el TDAH en la vida adulta impacta directamente en la situación laboral, las relaciones interpersonales, el Autoestima y se ha asociado con el consumo de sustancias y accidentes.


Tratamiento del TDAH


La principal forma de tratamiento en la población adulta está enfocada en el consumo de medicamentos, educación, entrenamiento de habilidades y asesoramiento psicológico. Es importante considerar que, aunque este tratamiento ayuda a controlar los síntomas, el TDAH no tiene cura.


En el caso de la Psicoterapia, la intervención puede estar orientada en mejorar la administración de tiempo, fomentar habilidades de organización, aprender a recudir la conducta impulsiva, fortalecer la Autoestima y adquirir herramientas para mejorar las relaciones interpersonales.

Psicología en Providencia